Disfrutar de la comida callejera de Palermo es una experiencia única que le permitirá sumergirse en la cultura local y en la aventurera historia de la ciudad. La tradición de vender comida para llevar en Palermo proviene del crisol de culturas que han vivido en la ciudad a lo largo del tiempo, como africanos, romanos, griegos, españoles, judíos y árabes. Cada pueblo introdujo su tradición alimentaria y todos juntos dieron origen a los bocados especiados y crujientes, a menudo preparados a la vista por los avezados expertos gastronómicos de la ciudad. En esta ruta gastronómica, degustará lo mejor de la comida callejera siciliana, paseando por el bullicioso y colorido centro histórico de la ciudad, escoltado por un experto local.
He aquí una lista de sus posibles degustaciones:
- Panino con panelle y crocchè: el corazón palpitante de la comida callejera de Palermo es un pan de sésamo relleno de "bolas" de puré de patatas o de tortilla de garbanzos.
- Sfincione: hecho con una masa parecida a la pizza cubierta con salsa de tomate fresco, pasta de anchoas, alcaparras y cebolla. El fincione es la idea más sabrosa de la pizza palermitana.
- Arancina de arroz: famosa en todo el mundo, esta bola de arroz se rellena con diferentes ingredientes (carne, jamón ahumado, espinacas, quesos variados y mucho más) y luego se fríe según una tradición centenaria.
- Cannoli siciliano: el gofre, tradicionalmente moldeado alrededor de una barra metálica caliente, relleno de una pasta dulce y cremosa a base de queso ricotta, fruta confitada, pistachos crujientes del país que lo rodea o gotas de chocolate negro. Una explosión de sabor tan colorida como dulce.
- Helado con brioche: helado servido en un brioche redondo, que tiene una pequeña tapa en el centro ("o'tuppoin")
- Granizado siciliano: la opción perfecta para refrescarse en una calurosa tarde de verano. Se sirve en un vaso y está pensado para concluir de la mejor manera una rica comida.
