La fascinante experiencia de navegar en el Estrecho de Gibraltar, zona declarada Reserva Internacional de la Biosfera por la UNESCO en 2006, cobra un toque aún más emocionante cuando los amigables habitantes de sus aguas, ballenas y delfines, se acercan a los barcos para exhibirse y satisfacer la curiosidad de los turistas. Hasta siete especies de cetáceos viven y migran en estas aguas.
