Su viaje comienza en la magnífica bodega, un verdadero santuario para los conocedores del vino. Aquí disfrutará de una inmersiva presentación audiovisual que le adentrará en la rica historia y el enigma de este extraordinario lugar. Mientras pasea por las antiguas bodegas, descubrirá el intrincado arte de los sistemas de solera y criadera y admirará las barricas centenarias que encierran el espíritu del vino.
A continuación, explorará la sección más antigua de la bodega, que alberga un archivo histórico de muestras y una variada gama de vinos. Aquí también descubrirá el legado perdurable de la familia que ha preservado esta tradición durante más de cuatro siglos.
La experiencia culmina con una cata en la que tendrá la oportunidad de degustar los mejores productos de la región. Deguste un vino criado bajo una capa de levadura, Pata de Hierro, seguido de otro que ha sido sometido a crianza oxidativa, La Eusebia. Más que una visita, es una invitación a saborear el alma de la tierra.
