Con suficientes plumas y lentejuelas como para rivalizar con Río, el Carnaval de Lanzarote es ruidoso, orgulloso, atrevido y descarado. Prepárese para dejarse llevar por un espectáculo de entretenimiento en el que las calles cobran vida con música, bailes y mucho más. Sólo se celebra una vez al año, por lo que es una gran oportunidad para vivirlo en primera persona. Cristina, una de nuestras guías locales, nos cuenta: "Le sorprenderán las batucadas que dan sonido al carnaval. Utilizan una selección de tambores, panderetas, campanas y silbatos para crear un ritmo rápido y repetitivo".
Le equiparemos con algunos accesorios para que se sumerja en el espíritu carnavalesco y le llevaremos a Puerto del Carmen, el centro de la acción. El carnaval de Lanzarote es una fiesta callejera como nunca has visto. Con disfraces coloridos, tocados altísimos y desfiles extravagantes, es un caso de cuanto más brillante, mejor. El ritmo de los tambores anima a todo el mundo", dice Cristina. Cuando te acercas a los tambores, sientes la vibración y no puedes evitar moverte al ritmo".
En los prolegómenos de la fiesta, cada carnaval elige a una reina y a una drag queen, por lo que es de esperar ver un montón de trajes escuetos y maquillaje llamativo, moviéndose al ritmo de la salsa. Todo culmina en un espectacular desfile el sábado 8 de marzo, cuando bandas de música y bailarines de cabaret recorren las calles en zigzag en una fiesta de diversión extravagante. Brillo, glamour y mucha emoción: si está en la isla, no se lo pierda.
