Experimente la tranquilidad de la Catedral de Barcelona antes de que abra sus puertas al público. Mientras la ciudad cobra vida, suba a las terrazas para disfrutar de un momento de serenidad, contemplando las impresionantes vistas del amanecer sin las multitudes habituales. Bajo la guía de un experto, adéntrese en la rica historia de esta obra maestra gótica. Descubra su intrincada arquitectura y aprenda sobre las leyendas de la Santa Cruz y Santa Eulalia que la rodean. Después de la visita, disfrute de un auténtico "esmorzar", un desayuno tradicional catalán, que le preparará para el día, como un auténtico catalán.
