Las puestas de sol son tan espectaculares como las de Chipre, y en este crucero nocturno a bordo del Aerosa podrá contemplar una en alta mar. Zarpe de la Costa Dorada en dirección a la ciudad fantasma de Varosha. Disfrute de las impresionantes vistas de la bahía de la Higuera y la bahía de Konnos, sumérjase en las cuevas de los piratas y hágase un selfie en el puente del Amor. Después, dese un chapuzón en la cristalina Laguna Azul mientras el cielo se tiñe de tonos dorados. Y como colofón, un bufé chipriota con postre.
